Comienza la operación bikini

Comienza el buen tiempo y las salidas a la playa, cuando vemos el bañador de la temporada pasada nos echamos a temblar, estos días podemos perder unos kilos de forma natural y sencilla:

Beber mucha agua

Dos litros de agua es lo ideal pero hablamos evidentemente de agua natural. Esta además de satisfacer la sed, evita la sensación de hambre, haciendo que las horas que dejamos entre comidas no signifiquen tanta tortura.


Si sientes que te hace falta comer algo más, mejor consume agua (puedes tener siempre un envase especial para almacenarla cerca a ti).

Tómate un buen tiempo para comer

Si trabajas en horario de oficina seguro que tienes una hora u hora y media para almorzar, pues bien, no corras tanto para hacerlo, modera las cantidades de comida que te llevas a la boca y trata de usar todos los cubiertos para que de esta manera,  llevarte un bocado tome más tiempo.

Recuerda que comer despacio no es solo un tip para mantener el peso ideal sino que además no hay nada más agradable que una persona que come despacio y se queda en la mesa hasta que todos hayan terminado de comer.

Evita la hora del postre

Sí, a todos nos gusta comer algo muy dulce y con mucho chocolate después del almuerzo pero esto puede traer consecuencias a tu peso. Te cuento que según la definición de la real academia de la lengua, postre también significa fruta que se sirve justo después del almuerzo así que ya sabes.

Puedes probar combinando frutas variadas, sobre todo las peras que aportan mucho a la digestión y te dan una sensación de poco apetito. ¡Haz la prueba!
Cuidado: las frutas generan que la digestión se haga más lenta así que no es recomendable consumirlas justo después de comer sino a media mañana o media tarde.

¿Siesta? No gracias

¿Es verdad o no que las siestas pueden resultar dañinas para las personas que están buscando mejorar su peso? Muchos nuevos estudios confirman que en realidad hacer siesta no está mal, lo que está mal es hacerla apenas acabamos de comer y más si la cantidad de comida a sido fuerte.
Lo más recomendable en lugar de una siesta (y esto también sirve para relajarse) es salir a dar una vuelta por el parque. Verás que hacerlo te ayudará a la digestión y de esta manera evitas la acumulación de líquidos.

No olvides el desayuno

Muchas personas creemos que el no haber tomado desayuno o haber consumido solo una fruta durante las primeras horas de la mañana significa que podemos almorzar la cantidad y medida que mejor nos parezca.
¡No es así! Las primeras horas de la mañana el cuerpo digiere mejor los alimentos mientras que el proceso a la hora de la comida es más lento y por lo tanto genera más cantidades de grasas.
¡Ten en cuenta estos consejos y siéntete feliz de mantener el peso que tanto has querido!